Esta antigua fábrica de tabacos madrileña y futuro museo de Artes Decorativas y Reproducciones Artísticas (si la crisis económica y las asociaciones vecinales no lo remedian) se ha convertido temporalmente en un centro cultural autogestionado donde bulle la cultura contemporánea en forma de talleres, exposiciones, conferencias y otras actividades.
Matadero Madrid. Cultura y ocio en Legazpi.
Música, cine, exposiciones, talleres, cesión de espacios a artistas emergentes… cualquier proyecto cultural tiene cabida en este magnífico contenedor. Matadero Madrid es una rehabilitación de 10 en toda regla. Por la forma (recuperando magníficamente cada una de las naves) pero también por el fondo, porque no se puede poner al día un edificio antiguo sin un buen argumento de uso, y Matadero Madrid, lo tiene.
PLANES EN MADRID: qué hacer un día de verano
Existe la creencia de que Agosto es el mes más caluroso de la capital pero no es cierto. Julio tiene una temperatura media más alta y más horas de sol. Si a eso le sumamos que los madrileños se escapan para disfrutar de las vacaciones tenemos como resultado una ciudad llena de atractivos para disfrutar. Os dejamos unas cuantas propuestas imperdibles para que no os aburráis estos días.
Museo Reina Sofía. Templo contemporáneo del arte.
El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía es el vértice contemporáneo del famoso triángulo del Arte de Madrid. Aunque en el Thyssen también podemos admirar fantásticas obras del siglo pasado, si de verdad queremos ponernos al día en vanguardias y arte de la segunda mitad del siglo XX, la visita al MNCARS es prácticamente obligada.
La Casa Encendida. Cultura y terraza en Lavapiés.
Uno de los puntos culturales más interesantes de Madrid es La Casa Encendida, situada entre Lavapiés y Embajadores. Tienen una variada oferta de exposiciones (siempre gratuitas) y conciertos (que rondan los 5€ y no suelen pasar de los 10€). Además imparten talleres y cursos en el ámbito de la cultura, el medio ambiente, educación, solidaridad, y juventud.
Museo Sorolla. El secreto de Chamberí con un jardín muy cuco.
Si hay uno de esos sitios mágicos en los que parece que entras en otro mundo, ese es sin duda la Casa-Museo Sorolla, donde vivió el pintor con su familia, construida para que sirviera también para trabajar, como lo atestigua su estudio, pensado en origen para que captara la mejor luz natural, esa que tanto le gustaba plasmar en sus cuadros.