En Lovnis puedes encontrar los platillos combinados de Arzábal, en el barrio de Salamanca. El restaurante es la nueva propuesta de Iván Morales y Álvaro Castellanos, que recuperan planteamientos propios de los bares de barrio, vajilla de Duralex de abuela, incluida. Han retomado el concepto tan castizo de los platos combinados, tanto de forma literal, como a través de reinterpretaciones que dan a estos platos tan típicos una rollo mucho más moderno.
En la parte de arriba tienen mesas altas donde puedes compartir de manera informal alguna de sus raciones con algo de beber. En la planta de abajo encontrarás las mesas bajas y alguna mesa comunal, para darle al tenedor con más tranquilidad y un poco más cómodo. Por el tipo de construcción del edificio y al ser un semi-sótano, se está la mar de fresquito, lo que agradecerás muy mucho todos los meses de verano ;-).
Tras tomar asiento, lo primero que llegó a nuestra mesa fue un gran cubo de mantequilla salada (sí, un cubo, enterito, par ti. Ñam.), unas aceitunas y un servicio de pan, para que vayas abriendo boca y no se te haga larga la espera de las comandas que se están preparando en la cocina. Nosotros no dudamos en atacar lo más castizo de la carta: unas patatas bravas y dos platos combinados, acompañados de un par de cervezas fresquitas y una botella grande de agua, cortesía del calor asfixiante que hace últimamente en Madrid.
Las Bravas (7€) hacen honor a su nombre, así que si no toleras bien el picante es mejor que se lo hagas notar al camarero o te verás abocado a pedir más bebida. El exterior estaba crujiente y el interior cremoso, tal y como nos gustan. Luego llegó la hora de los platillos combinados: huevos fritos, chistorra, patatas Puente Nuevo y pimiento de Guernica (12€) por un lado; y albóndigas guisadas, pisto y patatas fritas (16€), por el otro. El primero de los platos es un cla-si-ca-zo. Buen producto y bien ejecutado, con una yema en los huevos perfecta para untar. Con el segundo nos llevamos una sorpresa; las albóndigas estaban jugosísimas, sabrosas y las verduras del pisto estaban estupendas. Una grata sorpresa y sin duda, lo mejor de la comida. El horario es infalible. Más que amplio, digamos que simplemente está abierto a todas horas. Si estás por el barrio de Salamanca, no lo dudes y disfruta de su carta castiza.
Lovnis
Teléfono: +34 91.795.77.57
Horario: todos los días de 9:00 a 2:30 hrs.
Precio medio: 15-20€.
Dirección: General Pardiñas, 56, Madrid.
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