Antes de que llegaran los hipsters transformaran Malasaña, Toma Café ya enseñaba a todo aquel que cruzara sus puertas cómo se hacía un buen café. Sí, saben hacer un corazón con espumita, pero en este nuevo Toma Café Olavide lo que sigue importando es la buena materia prima, su tueste propio y su comida casera.

No hace falta ser un experto para ir a Toma Café Olavide. Si les pides un “café con leche” te lo harán con el mismo mimo y cuidado que la combinación más pro. Pero déjate aconsejar. Ellos te guiarán según tus gustos para que pruebes tu nuevo café favorito. Y claro, ya no volverás a ver un “café con leche” con los mismos ojos.

Después de pasar varias veces por la puerta sin tiempo para entrar, decidí marcar mi visita con una gran X en el calendario. Iba preparado para mi “momento cafetero”, pero después de ver su nueva carta de platos me animé a hacer un brunch a mi manera entre semana.

Como ves en las fotos, el local de la calle Santa Feliciana es sobrio y despejado. Lo principal del espacio es dónde se prepara el café, pero prácticamente no se le podría denominar como “barra”. Son más bien tres muebles con todo lo necesario para dar gusto a los muy cafeteros, como es mi caso. Amigos y vecinos conocidos entran y salen para oler el café recién molido, todo un lujo.

El principal problema de Toma Café Olavide es lo deliciosa que es su carta. Sus bocadillos y tostas combinadas pueden dar de comer al más hambriento. Sobra decir que si el brunch que servían en Malasaña tenía muchos adeptos, aquí son fieles convencidos.

Empecé con el “sándwich de roastbeef” y desde el primer bocado me vine muy arriba. Si todo iba a a estar igual de bueno, habría que probar el resto de la carta ¿no? Es verdad que no se complican con elaboraciones complejas, pero lo que hacen, lo hacen realmente bien. La carne estaba muy jugosa y el pan bien crujiente.

No había opción a irme sin probar el “fudge” (bizcocho de chocolate), ni la “tostada de ajo negro”, tampoco el “yogur con granola”… Si quieres salirte del menú “tortilla + ensalada” de las terrazas de Olavide, este es tu sitio.

Su ventanal es lo que uno busca cuando quiere una mesa para desayunar un fin de semana. Además ahora que empieza a refrescar y las terrazas de Olavide no apetecen tanto, que te caliente el sol de invierno con un buen café y una tostada es lo más.

En Toma Café Olavide los “puretas” del café podrán relajarse, ya que son unos auténticos expertos. Yo por mi parte, como no lo soy, me pienso apuntar a alguna de sus catas de café que anuncian de vez en cuando en sus redes sociales para aprender a distinguir entre variedades de café.
Toma Café Olavide
Teléfono: +34 910.55.98.02
Horario: lunes a viernes de 9:00 a 19:00 h, sábado y domingo de 10:00 a 19:00 h.
Dirección: Santa Feliciana, 5, Madrid.
Toma Café Olavide en nuestro mapa
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